Chile pondrá en órbita esta noche su tercer satélite

(infoespacial.com) Santiago.- Tras diez años sin contar con ninguna plataforma en el espacio, y después de esperar más de otro año a que  pudiera lanzarse, Chile pondrá finalmente en órbita este noche su tercer satélite, el FaSat-Charlie también conocido como SSOT(Sistema Satelital de Observación de la Tierra).

El satélite chileno, será lanzado junto a otros cinco en un cohete ruso Soyuz desde el puerto espacial europeo de Kurú en la Guayana Francesa, donde llegó el pasado 22 de noviembre desde las instalaciones de la empresa EADS Astrium en Toulouse, Francia, en las que se construyó y ha permanecido almacenado.

Las instalaciones guyanesas fueron visitadas por el Ministro de Defensa, Andrés Allamand, y el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea de Chile, Jorge Rojas, quines conocieron de primera mano los preparativos para este segundo lanzamiento de una nave Soyuz desde Kurú.

El lanzamiento "es un hito que culmina un proceso de varios años", señaló Allamand. Según el ministro, este proceso “esta destinado a poner en órbita un satélite que apoyará diversas políticas públicas en campos tan variados, tales como la elaboración de mapas de riegos provenientes de emergencias y desastres naturales, gestión agrícola, en todo lo referente a sequías, cuidado de recursos naturales a partir del examen de diversos fenómeno, como por ejemplo el retroceso de glaciares o avance de desiertos”.

El satélite entregará también información para la agricultura y planificación urbana.

Capacidades

El FaSat-Charlie tuvo un costo de 72 millones de dólares. El contrato para la construcción del SSOT fue firmado en 2008. El proyecto consiste en el  desarrollo de un satélite para captar imágenes con una resolución de 1,5 metros, así como las estaciones terrestres de control e interpretación y la formación de personal para su operación.

El ingenio espacial, contratado a Astrium debería haberse puesto en órbita en febrero de 2010, sin embargo permanecía almacenado en una “sala limpia” del centro de Astrium en Toulouse, a la espera de la terminación de las instalaciones de lanzamiento de los Soyuz en Kurú.

Una vez en el espacio, se prevé que el SSOT capture 100 imágenes diarias con una resolución de 1,45 metros en blanco y negro y 5,8 metros en su modalidad multiespectral.  Su ancho de barrido en tierra será de 10.15 Km, según explicó la Agencia Chilena del Espacio (ACE). El sistema tiene un peso aproximado de 130 Kg. y sus dimensiones son 1,4 m. de alto y 0,95 m de ancho.

La plataforma del satélite está basada en el Astrosat100, un microsatélite de observación de alta definición que utiliza la plataforma Myriade, desarrollada en conjunto por Astrium y el Centro Nacional de Estudios Espaciales de Francia (CNES). La tecnología de la carga útil del es de última generación, considerando un telescopio construido en Carburo de Silicio (SiC, Patente de Astrium), detectores TDI y su electrónica a bordo de nueva generación.

Se trata del tercer satélite chileno en llegar al espacio, después de que en 1995 se enviara el fallido FaSat-Alfa que no logró separarse del satélite ucraniano Sich-1. En 1998 se envió al FaSat-Bravo, que sí logró orbitar el planeta de manera independiente, pero dejó de funcionar a los tres años de vida por fallas en el sistema de carga de las baterías.

Factor de cooperación

Según señaló el ministro Andrés Allamand en Kurú "Chile, como país que avanza al desarrollo, debe unirse a las naciones que desarrollan capacidades para el aprovechamiento del espacio, como ya lo hacen en otros países de la región”.

Según Ricardo Israel, analista de defensa citado por la agencia AFP, el lanzamiento del satélite, que tiene uso civil y militar, "no altera la balanza estratégica" con respecto a sus países vecinos, especialmente Perú, con el que Chile mantiene un diferendo en la Corte de Justicia de La Haya, y Bolivia, que reivindica una salida al mar perdida en una guerra a fines del siglo XIX.

Para este analista, el satélite puede ser incluso "un instrumento de colaboración", que podría ayudar a las relaciones bilaterales.

"La permeabilidad de las fronteras de Chile con Perú y Bolivia se ha convertido en un problema importante para estos países, en cuanto al narcotráfico y el contrabando, y este satélite puede ser una buena herramienta" para compartir y combatir la situación, dijo a la AFP Israel.

"Luego de los fracasos anteriores, este satélite ha sido preparado con más dedicación y esfuerzos para no repetir las experiencias anteriores", dijo Israel.

No obstante, el desarrollo espacial chileno fue criticado por el diputado opositor Ricardo Rincón, quien cuestionó la falta de planificación en materia de política espacial y advirtió de problemas de financiamiento para la capacitación de los profesionales que se harán cargo de esta nueva tecnología.

"No vemos una política de Estado a la altura de las circunstancias y, además, hay serios problemas de financiamiento que podrían afectar el óptimo desarrollo del satélite", aseguró Rincón, integrante de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados.