Los satélites SGDC y Koreasat-7 ofrecen ya sus servicios
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Los satélites SGDC y Koreasat-7 ofrecen ya sus servicios

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Los satélites de telecomunicaciones SGDC Koreasat-7, lanzados el 4 de mayo, ya ofrecen sus servicios de telecomunicaciones a Corea del Sur y a Brasil. 

Para el lanzamiento se empleó un cohete Ariane 5 desde la base de Kurú, en la Guayana francesa, el 4 de mayo. Los dos satélites que portaba llegaron con éxito a la órbita, como publicó Infoespacial.

El SGDC es un satélite civil y militar construido por Thales Alenia Space para Visiona, una empresa conjunta entre Embraer y el operador de telecomunicaciones Telebrás.

Este sistema proporciona comunicaciones estratégicas y seguras para el Gobierno y la defensa y permite el acceso a Internet en Brasil, incluidas las zonas más remotas.

Además, este programa incluye la transferencia de tecnología y la formación de 30 ingenieros brasileños en las técnicas de la industria espacial, así como la integración a bordo de la estructura satélite de un panel compuesto por una empresa brasileña.

El presidente de Visiona, Eduardo Bonini, aseguró que "con el lanzamiento del SGDC, se demuestra la capacidad de Brasil en la implementación y gestión de un programa tan complejo e importante para Brasil en la fecha prevista, el coste y la prestación contratada". Asimismo, agregó que "el satélite cumple o excede los requisitos del gobierno brasileño y debe promover la inclusión digital de millones de brasileños y para la seguridad de las comunicaciones gubernamentales y militares."

El presidente de Telebrás, Antonio Pérdida, afirmó que "el SGDC inaugura una nueva era en la historia de las telecomunicaciones en Brasil, ya que podemos llevar Internet vía satélite a 100% del país, generando beneficios sociales y económicos, por lo que estaremos iluminando Brasil con internet de banda ancha, generaremos inclusión social y digital en escuelas, hospitales, centros de salud y, sobre todo, aumentaremos la competitividad de Brasil ".

La nave costó 1,9 millones de euros, pesa 5,7 toneladas, su órbita está a una altitud de 36.000 kilómetros y su vida útil estimada es de 18 años.

Para el control de las funciones de satélite SGDC de la Tierra fueron diseñadas, construidas y entregadas dos estaciones equipadas con antenas de 13 metros de diámetro cada una.

Estas estaciones serán utilizadas en actividades de TT & C (Telemetry, seguimiento y control) en Brasilia (principal), y Río de Janeiro.

Durante el lanzamiento, las estaciones de seguimiento en Alcántara y la isla de Ascensión, entre otros, han proporcionado actualización en tiempo real de los parámetros de la misión.

El procedimiento fue un éxito y los dos satélites entraron en órbita como estaba previsto.

Visiona es responsable de la estructuración e integración del programa SGDC, actuación y otras actividades en la mejora de los requisitos, selección y gestión de proveedores, la validación de los informes de ingeniería, supervisión de pruebas de producción y sistema necesarios para el éxito de la misión.

Durante más de dos años, los ingenieros trabajaron en Francia, en asociación con Thales Alenia Space, en el desarrollo y la producción del satélite en el programa de absorción de tecnología y en adquirir conocimientos que será fundamental para aumentar el contenido local de los programas espaciales en el futuro.

Con operaciones y presencia en los servicios de teledetección y los mercados internacionales de telecomunicaciones por satélite, la empresa brasileña aprovechará los conocimientos adquiridos durante el programa SGDC para proponer soluciones que incorporan tecnología de última generación en tecnologías de construcción y aplicaciones espaciales para el Programa Nacional de Atividades Espaciais (PNAE) y el Programa Estratégico de Sistemas Espaciales (PESE), buscando siempre el desarrollo de la industria nacional.

En cuanto al Koreasat-7 fue puesto en órbita para el proveedor de servicios de las telecomunicaciones de Corea del Sur, KT Sat. El satélite proporciona acceso a los servicios de Internet, multimedia, transmisión fija y comunicación a Corea del Sur, Filipinas, Indonesia y la India.

El SGDC, un satélite dual

Con la disponibilidad de comunicaciones seguras por satélite, una gama de nuevas capacidades queda abierta a los militares brasileños. Tareas de gran complejidad, como el seguimiento y la vigilancia de las fronteras por parte del Ejército de Brasil a través de Sisfron, adquieren un nuevo nivel de funcionamiento.

Con la implementación del sistema de enlace de datos de la campaña usando la radio digital fue asegurada una conexión de campo de tropas al nivel de mandatos intermedios.

La adquisición, procesamiento y gestión o distribución de información vital en tiempo real, sin dependencia externa, será una realidad para los militares brasileños.

Los oficiales tienen ahora la capacidad de recibir información de aviones no tripulados, de reconocimiento en línea que actúan verticalmente y de objetivos críticos a cientos de kilómetros de sus bases.

Las tropas sobre el terreno tendrán comunicaciones seguras con la parte trasera, la racionalización de apoyo y solicitudes de apoyo aéreo para la extinción de incendios.

En el mar, los buques de la marina de Brasil pueden navegar por períodos prolongados mientras se mantiene el conocimiento de la situación completa de su escenario de patrullaje, continuamente actualizada por vectores de la Fuerza Aérea de Brasil como el Orion de largo alcance de cuatro motores P-3AM o medio bimotor P-95M o el reconocimiento de aviones no tripulados en marcha por barcos.

En el aire, los nuevos cazas Gripen E BR utilizarán la señal del satélite y el enlace digital BR-2 para intercambiar información entre sí, al igual que otros aviones de los chorros E-99 Guardián de la escuadrilla (actualmente sometidos a un extenso programa de modernización).

También es posible la comunicación en tiempo real con las estaciones terrestres e incluso barcos y otros equipos con el fin de maximizar las tácticas de combate y eliminar las vulnerabilidades.

Teniendo en cuenta la tarea de defender 22 millones de kilómetros cuadrados en tierra y mar, acordado en los tratados internacionales, se puede prever los desafíos que la defensa aérea brasileña tiene delante de él a lo largo del siglo XXI.

La llegada de la señal del satélite ha permitido el uso de aviones dirigidos por control remoto, lo que ha supuesto una gran ventaja.

De alcance limitado cuando se emplea el método de guiado de una antena de destino (por tierra), el Hermes 450 y Hermes 900, utilizado por la escuadra Horus, puede cuadruplicar alcance y en gran medida ampliar su gama mediante el empleo de la guía la señal del satélite.

De la base de la Fuerza Aérea de Santa María (Rio Grande do Sul), ya se han construido y entregado las instalaciones para el control de aviones no tripulados en cualquier parte del país.

Foto: Visiona/TAS



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