Richard Branson completa su primer vuelo turístico al borde del espacio

Virgin Galactic ha completado el cuarto vuelo al borde del espacio este fin de semana con su dueño, Richard Branson, a bordo, quien “cumplió la ambición de toda una vida”, ha explicado Branson. Su avión cohete Unity despegó desde Nuevo México, en Estados Unidos, para pasar un momento de ingravidez fuera de la Tierra. Poco después de una hora, regresó de manera segura a la superficie del planeta.

La misión del dueño de Virgin Group ha sido evaluar la experiencia para abrir estos viajes al público e impulsar la incipiente industria del turismo espacial. El viaje lo convirtió en el primero de los nuevos pioneros del turismo espacial en probar sus propias naves, superando a Jeff Bezos, de Blue Origin, y Elon Musk, de SpaceX.

Tras el aterrizaje, Branson explicó que su "misión era convertir el sueño de los viajes espaciales en una realidad para mis nietos, para sus nietos, para muchas personas que viven hoy, para todos. Y habiendo volado al espacio, he visto cómo Virgin Galactic es la línea espacial para la Tierra. Estamos aquí para hacer que el espacio sea accesible para todos, y queremos convertir a la próxima generación de soñadores en los astronautas de hoy y de mañana".

Un camino desde 2004

Branson recorrió un largo camino para llegar hasta aquí. La primera vez que anunció su intención de volar al espacio fue en 2004, esperando tener un servicio comercial disponible en 2007. Sin embargo, algunas dificultades técnicas hicieron que lograr su objetivo tomara más del tiempo esperado.

El avión de Branson, conocido como Unity, no despega por sí solo desde la Tierra. Para volar, necesita ser transportado por un avión mucho más grande a una altitud de unos 15 kilómetros, desde donde es lanzado. Entonces, la aeronave enciende su motor para impulsarse hasta alcanzar una altura aproximada de 90 kilómetros.

¡Participa con tus comentarios en esta noticia!