La sonda espacial Juno de la NASA entra en la órbita de Júpiter

La sonda espacial Juno de la NASA entró en la órbita de Júpiter, el planeta más grande del Sistema Solar, ayer martes 4 de julio, tras cinco largos años de viaje.

Juno fue puesta en órbita el 5 de agosto de 2011 y es la nave impulsada por energía solar que más lejos ha viajado en el espacio. Es la primera de su categoría y fue diseñada para operar en el corazón de los cinturones de radiación de Júpiter, del que tomará imágenes en alta resolución y al que dará 37 vueltas antes de estrellarse contra su superficie.

El investigador principal de la NASA en el Southwest Research Institute en San Antonio (Texas), Scott Bolton, dijo en el momento en el que la sonda entraba en la órbita el planeta que “nos estamos acercando rápidamente al planeta en sí y ya estamos obteniendo información muy valiosa". También reconoció que esta es "la hazaña más difícil que ha logrado jamás la NASA”.

La misión servirá para conocer nuevos datos sobre planetas gaseosos, que conforman una gran parte de los planetas extrasolares descubiertos, y para comprender mejor el entorno que se sitúa fuera del Sistema Solar.

Juno orbitará aproximadamente a 5.000 kilómetros de la superficie de Júpiter, mucho más cerca que cualquiera de las sondas anteriores, que funcionaban con plutonio 238, mientras que la actual lo hace con energía solar.

A partir de ahora, la misión comienza su fase más decisiva, ya que Juno tiene que aproximarse a las nubes superiores del planeta cada 14 días, lo que durará hasta el 20 de febrero de 2018, cuando colisionará intencionadamente en la atmósfera de Júpiter

Esta es la primera vez que una sonda orbitará los polos de Júpiter y no en vano se decidió ponerle el nombre de la diosa Juno, hermana y esposa de Júpiter, que según la mitología romana, podía ver a través de las nubes en las que se envolvía su marido para serle infiel.

Foto: NASA – Recreación artística de Juno