Phobos-Grunt puede caer en la tarde del domingo cerca de la costa argentina o chilena
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Phobos-Grunt puede caer en la tarde del domingo cerca de la costa argentina o chilena

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(infoespacial.com) Madrid.- Según un boletín emitido esta mañana, la agencia espacial rusa Roscosmos prevé que los fragmentos de la sonda interplanetaria rusa Phobos-Grunt caigan probablemente en el Pacífico junto a las costas chilenas, sobre las 17.51 horas GMT del domingo. En el comunicado emitido ayer sábado la estimación de caída era para las 16:22 horas GMT del 15 de enero en el Atlántico frente a la costa argentina, según informo la agencia de noticias rusa Ria Novosti.

Según los datos de hoy el aparato está en una órbita de una altura máxima de 174,2 kilómetros y mínima de 149,7 kilómetros.

Roscosmos indicó ayer que la caída podía tener lugar en una zona comprendida entre los grados 51,4 latitud norte y 51,4 latitud sur, lo que comprende un amplio tramo que abarca desde la latitud de las Islas Malvinas, en el sur, hasta la latitud de Londres en el norte.

De acuerdo con un mapa de órbitas hecho público por la propia agencia espacial rusa ayer, y la información comentada por la misma  el punto más probable de caída se situaría en el mar frente a la costa este de Argentina, en un punto situado unos 1600 kilómetros al sur de Buenos Aires.

Según estimación de infoespacial.com sobre el mapa, el punto fijado se situaría a unos 300 a 400 kilómetros al este, frente a la provincia de Chubut o norte de la de Santa Fé, pudiendo servir como mejor referencia la latitud de la ciudad de Comodoro Rivadavia.

Conforme el mismo mapa, el punto de caída anunciado esta mañana se situaría aproximadamente en la latitud entre las poblaciones de Puerto Natales o de Punta Arenas en el sur de Chile.

En cualquier caso, la caída de restos de la nave, tras su reentrada y destrucción casi completa en la atmósfera no se produciría en un punto sino que se extendería en una zona más amplia.

Hora de caída

Según Roscosmos las citadas horas serían el momento "más probable" de la caída. Sin embargo, tanto expertos rusos como los miembros del Comando Estratégico de EEUU (Stratcom), prefieren mantenerse en la horquilla de fechas dos días, el domingo 15 de enero y el lunes 16.

En cualquier caso, tanto el lugar y como la hora de la caída se revisan a medida que la sonda va perdiendo altura, ya que también influyen en esas previsiones los cambios de actividad solar y situación atmosférica.

Una nave espacial como Phobos-Grunt, cuya órbita es relativamente circular - de acuerdo con Roscosmos, el 12 de enero en su ruta de vuelo había un apogeo de 193,9 kilómetros y un perigeo de 163,5 kilómetros – podría además entrar en la atmósfera en casi cualquier punto de su órbita.

De hecho, las últimas estimación son sustancialmente diferentes de otras dos emitidas por Roscosmos a principios de semana, momento en el que se consideraba que la sonda descendería más temprano el domingo y caería  en el Océano Índico frente a las costas de Java o cerca de Madagascar. Parece pues que la hora prevista va retrasándose.

Como ya sucedió con las anteriores caídas de grandes naves, las predicciones más precisas no pueden hacerse hasta muy poco antes de la caída, dicen los expertos.

"Alrededor de dos horas antes, los militares de EE.UU. publicarán su última predicción, que probablemente será la más precisa, ya que tienen datos muy detallados sobre la órbita del objeto que no están a disposición pública", dijo Brian Weeden , un asesor técnico de la Fundación Mundo Seguro y un ex analista de la USAF.

Campaña internacional

Expertos de la Oficina de Space Debris de la Agencia Espacial Europea (ESA) están coordinando la campaña internacional para evaluar la inminente reentrada de la sonda rusa. Esta campaña es una iniciativa del Comité Inter-Agencia para la Coordinación de Space Debris(IADC). El equipo de la ESA está trabajando con expertos de otras agencias espaciales para predecir las condiciones de la reentrada de Phobos-Grunt, sonda lanzada el día 8 de noviembre pasado a una órbita inicial de 206 x 341 km, donde un fallo impidió su inserción en la trayectoria que la llevaría hacia Marte. Roscosmos, declaró el fracaso de la misión el pasado día 13 de diciembre.

El día 2 de enero el IADC inició una campaña intensiva para predecir las condiciones de la reentrada de Phobos-Grunt en la atmósfera terrestre, según una nota de prensa emitida ayer por la ESA

El Comité Inter-Agencia es un foro técnico formado por 12 agencias espaciales, entre las que se encuentran la ESA, la NASA y Roscosmos. Su principal objetivo es coordinar las actividades derivadas de la presencia de satélites inoperativos, fragmentos de objetos artificiales y micrometeoritos en órbita a nuestro planeta.

La Oficina de Space Debris de la ESA, ubicada en el ESOC, el Centro Europeo de Operaciones Espaciales en Darmstadt, Alemania, aloja la base de datos sobre eventos de reentrada del IADC, que permite intercambiar parámetros orbitales y predicciones de reentrada entre los miembros del Comité. Los parámetros orbitales de Phobos-Grunt han podido ser determinados en base a las observaciones realizadas por la Red de Vigilancia Espacial estadounidense (SSN) y por el Sistema de Vigilancia Espacial ruso. Los radares europeos ubicados en Alemania y Francia también están trabajando en la determinación de la órbita de la sonda.

Según los propietarios de la sonda, Phobos-Grunt tiene una masa de 13.5 toneladas, de las que 11 son combustible, y un tamaño de 3.76 x 3.76 x 6.38 m, con unos paneles solares de 7.97 m de envergadura.

Los análisis realizados por Roscosmos y por la NASA indican que los tanques de combustible, cargados de dimetilhidrazina asimétrica – también conocida como UDMH – explotarán a más de 100 km de altitud, desintegrándose completamente y quemando todo el combustible.

“Esto, junto al hecho de que la masa ‘seca’ del satélite es relativamente baja, de tan sólo 2.5 toneladas, nos lleva a considerar la reentrada de Phobos-Grunt como un evento no peligroso”, dijeron responsables de la oficina Space Debris.

Roscosmos calcula que como mucho 20 o 30 fragmentos sobrevivirían a la reentrada y alcanzarían la superficie terrestre, con una masa total inferior a los 200 kg.

Ilustración: Roscosmos



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