El Ejército del Aire y el Espacio, ¿solo un nombre o algo más?

Ejército del Aire y el Espacio, este será a partir de ahora el nombre oficial de la Fuerza Aérea española. La nueva denominación fue aprobada por el Gobierno el pasado martes en el Consejo de Ministros, a propuesta del Ministerio de Defensa, y busca visibilizar el trabajo y el esfuerzo de los últimos años para adaptarse a un dominio, el espacial, con una relevancia creciente en las operaciones en diversos ámbitos como las comunicaciones militares, la inteligencia o la defensa antimisiles.

El nuevo nombre ha sorprendido al público general y hasta ha sido objeto de burlas en redes sociales –que se han llenado de memes-, pero la realidad es que el Ejército del Aire apuesta desde hace algún tiempo ya por dar el salto al Espacio. De hecho, tiene una unidad especializada en este dominio, el Centro de Operaciones de Vigilancia Espacial (COVE), creada en noviembre de 2019, cuyas instalaciones se encuentra en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid).  

El COVE ya efectúa operaciones de vigilancia y control del conocido como espacio ultraterrestre. Desde diciembre de 2020 opera y mantiene el radar de vigilancia espacial S3TSR (Spanish Space Surveillance and Tracking Space Radar), ubicado en la base aérea de Morón y suministrado por la empresa española Indra. 

Este sistema es capaz de detectar objetos que atraviesen su campo de visión (FoV–Field of View), con un alcance entre 200 y 2000 km, es decir, en órbitas LEO (Low Earth Orbit) y opera las 24 horas del día los siete días de la semana. En 2021, el radar siguió los más de 1.000 fragmentos de basura espacial generados tras la destrucción del satélite inoperativo Cosmos-1408 por un misil Asat ruso. 

Escudo del COVE. Foto: Ejército del Aire

El hito más reciente del COVE se produjo el 14 de julio de 2021, cuando alcanzó la Capacidad Operativa Inicial (IOC). Entre sus actividades también se incluye la distribución de predicciones de meteorología espacial y su posible impacto, así como predicciones acerca de la exactitud de las señales de posicionamiento, navegación y tiempo. A más largo plazo, está previsto que sea capaz de prestar servicios de gestión de tráfico espacial. Según el Ministerio de Defensa, "la adquisición de todas sus capacidades se alcanzará previsiblemente en junio de 2023, con un equipo de 30 personas altamente cualificadas". 

Próximos pasos 

El cambio de denominación no es algo del todo nuevo. El jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire (JEMA), general del aire Javier Salto, ya adelantó hace más de un año los planes para incluir el Espacio en el nombre del Ejército del Aire. 

También detalló que la Fuerza Aérea realiza operaciones en el dominio espacial en cuatro subdivisiones: operaciones de apoyo especial, de conocimiento de la situación espacial, de control del espacio, y de apoyo a otro tipo de operaciones espaciales. No obstante, los objetivos son ampliar esas capacidades exponencialmente. El Ejército del Aire y el Espacio aspira, por ejemplo, a llegar a la alerta temprana de misiles balísticos dentro del apoyo a las operaciones y al control tanto ofensivo como defensivo del espacio, según explicó el JEMA.  

España sigue los pasos de Francia que también ha incluido rebautizado su fuerza aérea para incluir el Espacio, en este caso, Armée de l'air et de l'espace. Otros directamente han creado nueva fuerza espacial como Estados Unidos. A este respecto, el Ministerio de Defensa destaca que este cambio de denominación se efectúa “en consonancia con las iniciativas que actualmente están tomando otras fuerzas aéreas aliadas de nuestro entorno”.