Curiosity amartizó con éxito

(infoespacial.com) Washington.- Sin necesidad de ajustes de última hora y con toda normalidad, la nave Curiosity logro tomar suelo con exito sobre la superficie de Marte a las 05:31 GMT, tras un viaje de  un viaje de 566 millones de kilómetros y ha dado comienzo a una misión de dos años en busca de pruebas de vida en el planeta rojo.

La agencia espacial norteamericana (NASA) confirmó que el artefacto de una tonelada, logro posarse en el punto previsto del cráter Gale,  tras la compleja maniobra durante los denominados "siete minutos de terror" desde su ingreso en la atmósfera marciana.

En el momento de la toma, Marte se encontraba a 248 millones de kilómetros de la Tierra. Algunas horas antes de la aproximación final, la nave comenzado a acelerar a medida que se acerca a la la órbita gravitatoria marciana, cien veces menos densa que la de la Tierra,  hasta alcanzar los 21.200 kilómetros por hora.

La fricción de una atmósfera tan tenue no es suficiente para frenar el descenso, por lo cual a unos 11 kilómetros de la superficie marciana se desplegó el paracaídas supersónico de 16 metros de diámetro.

De 45 kg de peso, se trata del paracaídas más grande construido para una misión espacial, ya que ha tenido que soportar una fuerza de 29.500 kilogramos, y aminorar la velocidad de descenso a unos 320 kilómetros por hora.

Los siete minutos

Los distintos momentos del proceso de aproximación y toma fueron conocidos desde la Tierra por unos pitidos emitidos por la nave, seguidos con ansiedad en distintos centros desde los que se ha seguido el amartizaje.

En concreto, en Madrid, numersas personas se dieron cita en el Centro de Astrobiología CSIC-INTA, situado en la sede del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial en Torrejón de Ardoz, desde donde se siguió en directo la transmisión de la NASA. El CAB ha sido el desarrollador de uno de los instrumentos científicos que porta el rover.

En el momento de comenzar lo que la NASA dio en bautizar como los “siete minutos de terror”, la nave se encontraba a unos 1.800 kilómetros de la superficie marciana. Mediado el minuto 05:24 e recibió el primer pitido comunicando que el Mars Science Laboratory estaba en la atmósfera.

A las 05:27 llegó el siguiente pitido anunciando el despliegue del paracaídas, a unos 10 kilómetros de altitud, momento que fue recibido con una explosión de aplausos en el Jet Propulssion Laboratory de la NASA en Pasadena, centro de mando de la misión.

Poco después, a unos ocho kilómetros del suelo, se soltó el escudo térmico, que había soportado hasta 900 grados de temperatura en la entrada,  dejando al descubierto la parte baja del vehículo, desde la cual el sistema radar comenzó a calcular la navegación final para aproximarse hasta el punto de descenso.

En este momento es la propia nave la que controla el vuelo, atendiendo a factores como el viento. El sistema puso en marcha los ocho retrocohetes situados en los ángulos del aparato para seguir frenando la aproximación y permitir ligeros desplazamientos.

A unos 15 metros del suelo, se abrió el Skycrane, la grúa voladora que sostuvo al Curiosity deslizándolo con cuidado hasta el mismo suelo. Doce segundos antes del contacto, Curiosity desplegó sus seis ruedas para posarse y separarse automáticamente de los cables que le mantenían unido a la grúa.

A las 06:10 GMT de la mañana comenzaron a llegar a la Tierra las primeras imágenes de la superficie marciana tomadas desde el Curiosity.