D. Fernández (Arquimea): "Tendremos la primera constelación que sea rentable y sostenible" (1)

El Noveno encuentro profesional sobre circuitos integrados analógicos y de señal mixta para aplicaciones espaciales (Amicsa 2022) fue organizado por la Agencia Espacial Europea (ESA) y Arquimea y se celebró la semana pasada en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. 

Tras la celebración de las últimas ediciones de forma telemática y una última presencial en Bélgica, Amicsa ha vuelto al formato presencial en Madrid. El presidente y fundador de Arquimea, Diego Fernández, respondió a las preguntas de Infoespacial.com acerca de Amicsa, Arquimea y la nueva constelación de satélites de compañía, Beetlesat. Debido a su extensión, esta entrevista se ha dividido en dos partes de las que a continuación se reproduce la primera.

¿Cómo ha sido organizar Amicsa tras dos años desde su última edición presencial?

Debo decir que el congreso se tenía que haber celebrado en Madrid hace ya tres años, pero llegó la pandemia y lo tuvimos que cancelar todo. Hemos empujado para que se celebre porque aún había algo de pereza por volver al evento presencial. Yo creo que el evento presencial es clave para los negocios.

¿Qué aporta lo presencial?

Las mayores oportunidades de negocios, los mayores contactos, los he hecho tomando un café, no los he hecho ni escuchando una presentación ni leyendo los papers, los he hecho tomando un café o comiendo con la gente. Si queremos que la industria crezca y tenga cada vez más sinergia hay que volver a lo presencial. Es fundamental.

Material microelectrónico expuesto en Amicsa 2022

¿Cómo ha sido organizar un evento de una temática tan concreta?

Creo que Amicsa es un congreso de muy alta tecnología. El perfil de la gente que investiga en tecnologías de asics (Application-Specifics Integrated Circuits) para el sector espacial es de muy alto nivel, se necesitan físicos, doctores, ingenieros… Los expertos están repartidos por toda Europa en compañías muy tecnológicas. Es muy fácil llegar a esta gente porque es un círculo muy pequeño; en realidad nos conocemos todos. Es verdad que ha sido bastante fácil reunir a los ponentes porque llevaban años investigando. La gente ha estado en pandemia, pero ha seguido investigando y ha seguido realizando avances en su trabajo. Yo creo que todos tenían ganas de exponer lo que han estado haciendo en este tiempo y la verdad es que ha sido bastante fácil e ilusionante capturar ese talento.

¿Arquimea es una empresa espacial o tecnológica?

El espacio es un sector que te obliga a desarrollar tecnologías que no existen para resolver problemas cada vez más complicados. El espacio tira de retos científicos y tecnológicos que al final requieren que la tecnología, los materiales y los componentes que están debajo aguanten estas condiciones. Muchas de las tecnologías que usamos hoy en día: el colchón de la cama, el teflón de las sartenes para que no se pegue el huevo frito… han sido desarrolladas para aplicaciones espaciales. En microelectrónica pasa lo mismo, nosotros cuando empezamos hace ya 17 años a diseñar asics nos dimos cuenta de que hacer un asic que aguante la radiación para un satélite era muy similar que hacer un asic para otra aplicación. Entonces reorientamos la compañía para desarrollar tecnologías que no solamente fuesen asics; dejamos de trabajar solo para el sector espacial y nos metimos para cualquier sector de la sociedad. 

¿Qué provocó este cambio?

Ha sido parte del éxito y del crecimiento de la compañía, nos ha obligado a meternos en otros sectores. Con el know how que teníamos, con el talento que ya poseíamos en el área espacial, hemos podido crecer en otros sectores que tienen un crecimiento bastante mayor que el espacial simplemente porque son más grandes.

¿Cómo es la nueva constelación de satélites de Arquimea?

Hemos anunciado en primicia al sector, aquí, en Amicsa, que Arquimea está preparando una constelación de satélites de telecomunicación. Se va a llamar Beetlesat en honor a The Beetles, no hay que darle más vueltas (ríe), y estamos muy contentos. Nos hemos asociado con una empresa israelí que tiene tecnología clave para un componente fundamental para este tipo de satélites como son las antenas. Nosotros vamos a aportar nuestro conocimiento en componentes para espacio y vamos a construir una fábrica. Vamos a preparar unas instalaciones para construir 250 satélites al año. Con esto yo creo que, si tenemos éxito, por un lado España se va a posicionar como uno de los países del mundo con capacidad de fabricación masiva de satélites y por otro seremos capaces de entrar en el selecto club de las constelaciones; ahora mismo hay tres o cuatro multibillonarios jugando, pero realmente ninguna ha logrado rentabilidad hasta la fecha. Si todo va bien creemos que podemos tener la primera constelación que sea rentable y sostenible por sí misma.

La entrevista continúa en: D.F. (Arquimea): "Tenemos la financiación para empezar con el despliegue de la constelación" (y 2)