(infoespacial.com) Moscú.- Una nave espacial realizará un vuelo de demostración con su correspondiente aterrizaje en la superficie [de la Luna] y volverá a la Tierra en 2030. Así lo recoge el documento en el que se detalla la estrategia de la agencia espacial rusa Roscosmos, según publica Tom Parffit, corresponsal de The Telegraph en la zona.
Es la primera vez que Moscú pone fecha al lanzamiento de una misión lunar. Sin embargo, y debido a la cantidad de veces que ha anunciado ambiciosos planes de exploración que finalmente no se han materializado, la noticia está siendo recibida con mucha prudencia.
De hecho, el pasado mes de enero Rusia afirmaba estar dispuesta a enviar una misión pilotada a la Luna tras el éxito de varias misiones automáticas para preparar su llegada, según explicó el director general del consorcio aeroespacial ruso Lávochkin, Víktor Jártov.
Como recuerda Parffit, el país ahora presidido por Dmitri Medvédev ganó la primera etapa en la carrera hacia la Luna cuando consiguió poner en órbita al astronauta Yuri Gagarin (1961), primer ser humano en viajar al espacio.
Sin embargo, fue el Apollo 11 en 1969 el encargado de llevar a los primeros hombres hasta la superficie lunar y, por tanto, el que dio la carta final a Estados Unidos para ganar la partida de la Luna. La hazaña de Neil Armstorng y Buzz Aldrin Jr significó un pequeño paso para el hombre, un gran paso para la humanidad, y la cancelación del programa lunar soviético.
Ahora, más de sesenta años desués del viaje del Apollo, parte del sector aeroespacial ruso ve con buenos ojos un posible viaje a la Luna porque cree que podría ayudar a reaviviar su programa espacial tras una época llena de turbulencias y problemas. Sin embargo, no todos son de esa opinión.
En los años 60 la Unión Soviética competía codo con codo con los Estados Unidos, señala Yury Karash, miembro de la Academia de Cosmonautas de Rusia, en cuya opinión un viaje tripulado a la Luna no ayudará a recuperar el prestigio perdido con los años.
Fotografía: NASA
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