Rusia ha lanzado con éxito el satélite hidrometeorológico Arktika-M-2, que operará para vigilar la superficie de la Tierra y el océano Glaciar Ártico, según ha detallado Roscosmos. El despegue ocurrió a las 12:17 hora rusa (10:17 hora española) de este sábado desde el cosmódromo de Baikonur en Kazajistán, a 2.500 kilómetros de Moscú, a bordo de un cohete Soyuz-2.1b.
El lanzador funcionó normalmente, la etapa superior Fregat se separó de la tercera etapa y va de camino hacia la órbita deseada, de acuerdo a información de la agencia oficial Sputnik. El ingenio tiene un peso total de 2.077 kilos, cuenta con una vida útil de siete años y es el segundo de su serie. El primero, Arktika-M-1, fue lanzado el 28 de febrero de 2021 y entró en funcionamiento seis meses después.
Las intenciones rusas es que para 2031 se desarrollen y pongan en funcionamiento dos sistemas "árticos" más. Esto permitirá que la frecuencia de los estudios de la región polar se reduzca a la mitad y aumente tanto la eficiencia de la detección y el seguimiento de fenómenos naturales y emergencias.